Suficiente

Cuando me convertí en mamá de Luis Emilio descubrí que nada nunca es suficiente. Y sin darme cuenta, comencé a sentirme un poco frustrada por mi limitada capacidad para darlo todo. Pues si alguien merece que uno lo dé todo en cualquier momento y bajo cualquier circunstancia es y será siempre: mi familia. Y bueno, caí en la cuenta de lo deficiente que soy como mamá, pues siempre puedo dormir menos, jugar más, ser más paciente, más divertida, más creativa, menos ocupada, y así. Un largo etcétera de desaciertos. Y escribo esto no porque busque en usted, amable lector, una palmada en la espalda y una sonrisa solidaria. No. Lo escribo porque de la única persona de quien espero aceptación cuando se dé cuenta de que no soy perfecta, es de él, mi hijo. Quien hoy, antes de dormir, me dio un abrazo y me dijo "te amo mamá". Lo que, sin más, me trajo a escribir. Para mí, es suficiente.

One Response so far.

  1. Dorix says:

    Lo es. Es suficiente.